El reposo de mujeres embarazadas para evitar riesgos es un mito.
Especialistas afirman que mientras más ejercicio se realice durante el embarazo, es mejor. Las únicas dos razones por las que una mujer embarazada debe evitar el ejercicio son un diagnóstico de placenta previa o una amenaza de parto pretérmino.
Si la mujer no tiene ninguna de esas condiciones, debe hacer la mayor cantidad de ejercicio posible.
Socialmente todo mundo se mete en los embarazos, todos opinan que entre más quieta se quede una embarazada es menos probable que tenga complicaciones, pero no hay evidencia científica que pruebe eso.
La recomendación es que haga por lo menos 45 minutos de ejercicio aeróbico de cinco a seis días a la semana, pero si puede hacerlo diario mejor. No se ha visto que el ejercicio favorezca algún resultado perinatal adverso.
Las mujeres que hacen ejercicio durante el embarazo tienen menos riesgo de diabetes gestacional, preclampsia, dolor de espalda y cesárea.
Si hace ejercicio y tiene una nutrición adecuada está favoreciendo un entorno bioquímico e inmunológico de programación fetal favorable para el bebé.
Natación, caminata en pendiente o elíptica son las actividades de bajo impacto que recomienda.
Fuente: Instituto Nacional de Perinatología, México.
